jueves, 18 de marzo de 2010


Sos eso que deseo encontrar y de lo que suelo escapar, sin apuro y dueña de un lento caminar, retorno mi camino bordeando el quizás. Me confieso con el miedo mientras pide un café la cordura que se ríe de nosotros por detrás. Nada de eso tiene que importar pero importa y tus lindos ojos negros vuelven a brillar y ahora, más encendidos que nunca, alumbran todo su pasar. "Las vueltas de la vida y el destino los quieren acá" son los teoremas de los conformistas que siempre desean explicar. Pero ya me siento incapaz de comprender y me quedo solo a ver porque el sentido de la escucha lo perdí al dejarlo allí, en un pasaje donde me regalaste el sonido de tu beso. Mi audición se quedó, no pudo retornar a estos oídos, que son algo orgullosos y reberles como lo es su dueña, y comprendo que si es realmente mio, hay que dejarlos reposar. A veces necesitan levar. Ahora..¿cómo se prosigue? Porque el viento trae tu perfume y se lleva todas mis seguridades, por esta maldita costumbre de andar olvidando lo que a uno le hace bien, por estar tan mareada que no distingo mi querer.

1 comentario:

Santi dijo...

Sin palabras :)

Te adoro!